La sesión de Reiki, donde el paciente permanece acostado en una camilla, descalzo y vestido. Se utiliza música suave y aromas como incienso o esencias (aromaterapia).
Se colocan las manos sobre una serie de ubicaciones en el cuerpo y la Energía Reiki fluye. Durante un tratamiento, se siente una relajación profunda, una gran sensación de paz.
Se pueden hacer sesiones individuales para obtener una profunda relajación y sensación de bienestar momentáneo o bien el tratamiento de cuatro sesiones donde se trabaja más a fondo para sacar al paciente de algún estado de desarmonía. Al finalizar este tratamiento se podrán tomar sesiones individuales con la frecuencia que el paciente necesite.